El toque de la esquila por las ánimas en Tornavacas, año 1987
Cada día al anochecer una piadosa mujer enlutada recorre la
calle real de Tornavacas tocando la esquila por las ánimas. En cada bocacalle,
a la entrada de las callejas y al pasar por los puentes detiene el sonido de la
campana como señal de respeto por todos los difuntos.
Es esta, una tradición muy antigua que aún se conserva en
Tornavacas. El toque de la esquila comienza en la cimará del pueblo y
termina en la Jondoná. Al finalizar, mirando hacia el cementerio reza
una oración y un padre nuestro, por el descanso de todos los difuntos del
pueblo.
“Ánimas benditas que en el purgatorio estáis, por la
misericordia de Dios, alivio y descanso tengáis”.
Mientras recorre la calle tocando la esquila, los hombres se
descubren la cabeza y las mujeres rezan un padre nuestro, por todos los
difuntos.
Sirva este pequeño trabajo como homenaje a todas las personas que dedicaron su tiempo, su voluntad y respeto, a mantener viva esta
tradición y a todas las mujeres que en la actualidad continúan ejerciendo esta
preciosa labor por su pueblo Tornavacas.
